Desde el pasado 15 de junio, los amantes de los viajes tenemos la suerte de contar con un handicap menos, tanto económico como comunicacional, en nuestras escapadas al extranjero gracias al fin del roaming en la Unión Europea que nos va a permitir seguir haciendo uso de nuestra conexión a internet móvil y llamadas a nuestro país de origen por el mismo precio que lo haríamos habitualmente desde casa.
Pero esto tiene un peligro si viajamos a Andorra. Y es que, si tienes pensado desplazarte hasta el principado situado entre Francia y España para pasar unos días de tranquilidad, compras, balneario o esquí, deberías saber que si quieres colgar fotos en instagram, hablar con tus amigos por Whatsapp o llamar a la familia para decir cuantos Toblerone quieren lo harás con una tarifa especial de roaming al margen de la nueva ley europea.
¿A qué se debe esto?
Principal y únicamente, el roaming se seguirá pagando en Andorra al tratarse de un país que no pertenece a la Unión Europa, ni tiene un acuerdo específico en este área con la misma.
Así que, por el momento, las únicas opciones económicas allí serán comprar una sim local o desconectar por completo durante la estancia.